miércoles, 23 de febrero de 2022

El dinero al mal

 Lo bello del mal. Allá donde una sociedad sufre el silencio de la soledad y la incomprensión, marginados unos pocos desafortunados, resurge una nueva pasión por  un cambio radical. 

Qué bello cuando una persona, con un grupo, resurgen a la par, de distinta forma pero en cierta forma igual, con las mismas indiferencias que han querido levantar, cómo a veces el futuro se vuelve incierto por las mismas dudas al comenzar, pero cuando todo empieza, no hay quien lo pueda parar.

Y que quien no puede ver la belleza del asunto, es porque las piernas le empezarán a temblar, no se querrá levantar por no ser uno de menos en vez de uno de más, y poco a poco restando días, una nueva solución se alzará, un distinto comienzo para un distinto final.

Donde por primera vez en la historia de la humanidad, surge una y otra vez pero completamente desigual, un motivo por el que seguir, un motivo por el que luchar, solo hay que saber bien a quién y qué elegir, esperemos de un acuerdo para todos justo, jurídico y social.

Quien estuvo ahí apoyando quien hizo bien, el que lo hizo y el que estaba detrás; el bien. Quien falaciosamente regala su cerebro, su pensar, su dinero al mal, que no esperen un justo trato por ser injustos, para ser justos ¿se deberían perdonar?

Motivo de disgustos y de cambios, lo que unos quieren para otros unos, unos otros no es igual que lo que une a unos que lo que une a un nosotros. 

Por una sociedad, para una pasión, por un ideal, con un amor.